Aunque no es normal, no es nada raro encontrar casos de dolor de cadera en adultos jóvenes y de mediana edad activos. De hecho, este problema suele presentar un amplio conjunto de signos y síntomas que provocan confusión en su clasificación, definición y diagnóstico. A lo largo de este post, nos gustaría abordar este tema en profundidad, así como las principales causas para su aparición.

Lo primero que tenemos que saber es que esta dolencia puede llegar a ser incapacitante para el paciente, llegando a afectar de manera severa a su trabajo, convivencia o actividades recreativas. Por desgracia, hasta hace relativamente poco, apenas existían estudios relacionados con las causas del dolor de cadera en estos rangos de edad o en pacientes de mayor edad.

Por suerte, y como suele ocurrir en casi todos los aspectos de la vida, la investigación nos ha permitido comprender de forma más adecuada y precisa las causas del dolor de cadera en adultos jóvenes, incluyendo el síndrome de pinzamiento femoroacetabular (FAI) o la displasia de la cadera. Hay que destacar que estas dos causas son totalmente tratables cuando nos referimos a adultos jóvenes.

dolor de cadera en adultos

Evaluación, causas y tratamiento del dolor de cadera en adultos jóvenes

En este sentido, es importante tener claro ciertas pautas relevantes:

  • En los casos más graves o persistentes, habrá que derivar al paciente a un especialista.
  • El uso de pruebas de imagen está indicado en pacientes con dolor de cadera cuando existe sospecha de patología intraarticular (roturas del labrum, inestabilidad de cadera) o de patologías graves (tumores, infecciones, necrosis avascular). De todos modos, siempre se deberán interpretar las pruebas con cautela, contrastándolas con los signos y síntomas que presenta el paciente.
  • Las pruebas o test ortopédicos junto con la historia clínica pueden ayudar a mejorar la precisión en el diagnóstico de algunas de las causas más comunes del dolor de cadera. El síndrome de compresión femoroacetabular (FAI), la displasia de cadera y la osteoartritis temprana son algunos ejemplos
  • La mayoría de los trastornos que causan dolor en esta zona provocan a su vez un deterioro prematuro, derivando en una pérdida de función.
  • Es importante señalar que el dolor localizado en la cadera puede tener su origen en enfermedades músculo esqueléticas o no músculo esqueléticas, por lo que la realización de una entrevista clínica es fundamental para detectar las posibles «señales de alarma» que indican al profesional que debe derivar al paciente para una atención médica especializada.
  • Además, un paciente joven que padezca dolor en la cadera, puede señalar distintos síntomas o signos, entre los que se encuentran chasquidos, bloqueos, debilidad, fallos o, incluso, cojera tras la realización de actividad física.
  • El tratamiento de primera línea a considerar va en la línea conservadora. Modificación de la actividad diaria o deportiva, fisioterapia y, en caso necesario, siempre bajo prescripción médica, la toma de medicamentos analgésicos o antiinflamatorios.
  • El tratamiento en fisioterapia para este tipo de dolencias está encaminado a reducir el dolor y mejorar la función de la articulación mediante la aplicación de técnicas físicas (terapia manual, técnicas invasivas, diatermia), la adaptación temporal de ciertas actividades o posiciones (para evitar el aumento de la irritabilidad de la zona) y la realización de ejercicios para mejorar la resistencia y la tolerancia a la carga de los tejidos.

En cualquier caso, para poder tratar esta afección de manera adecuada, lo importante será ponerse en manos de especialistas capaces de realizar un diagnóstico eficaz para, posteriormente, iniciar un tratamiento adecuado. Te esperamos en Activefisio para ayudarte en todo cuanto esté en nuestras manos, si necesitas fisioterapeuta deportivo o rehabilitación en Palma… ¡No esperes ni un segundo más!